lunes, 18 de enero de 2010

en todos los sentidos

“Yo estoy seguro que puedo soportar cualquier cosa. Todo, todo menos vivir sin música”

COMO TODO INICIO TIENE UNA INTRODUCCIÓN, esta vez voy a comenzar (y como mandan todas las reglas) por el principio. La primera vez que tuve contacto material con la música, fue con colourbynumber, el segundo disco de cultureclub. Yo, apenas era un niño cuando llegó a mis manos el pequeño y multicolor cassette de esta banda en edición nacional. Anteriormente solo había sabido de la música (que a mi me gustaba) a través de la radio, o los videos que podía ver todas las noches en un programa musical (que conducía un tipo de enormes bigotes) llamado discoclub.

Mi hermana mayor (la propietaria de ese cassette), no tenia idea de las innumerables horas que yo (su hermanito menor) me pasaba escuchando una y otra, y otra vez todas y cada una de las canciones que se reproducían en el pequeño stereo (que le regalaron -a ella- por sus 15 años) en el que yo siempre colocaba la cinta para escuchar la dulce voz de boygeorge (ese chico raro, vestido y maquillado como una mística diosa viviente) diciéndome cosas que en ese entonces no lograba entender, pero que tarareaba sin parar en la hora del recreo de mi colegio, mirando todas las melindrosas novelas mexicanas que adoraban mis 4 hermanas en la televisión, cuando paseaba feliz (y solitario) en las pocas tardes que me dejaban solo todas las mujeres de mi casa, ó mientras jugaba fútbol (y fingía divertirme) junto a todos mis demás amigos porque a mi nunca me gustó ese deporte, pero disfrutaba, como todos, de la compañía de mis pequeños cómplices aliados de infantiles travesuras.


The victims we know so well they shine in your eyes when they kiss and tell strange places we never see but you're always there like a ghost in my dream and i keep on telling you please don't do the things you do when you do those things pull my puppet strings i have the strangest void for you son las letras del ultimo tema de este placa. Y seguro, si ese cassette hablase, les dijera que el viejo lado B (de esa cinta) ha sido reproducido millones de veces por este escribidor, coreando a la perfección las letras de esta canción, sin saber cual era el contenido de su mensaje.

Como todo en este mundo tiene una conexión, años después, pude entender el significado de todas sus letras, reproducirlas en la intimidad de un delicioso duchazo, en algún karaoke (con los borrachos de ocasión), o imaginando que alguna vez podría escuchar los mismos temas (otra vez) en vivo, como lo ha hecho el resto del mundo en su época de oro.

Yo, soy de los que no abrigan esperanzas, porque a mi me enseñaron a olvidarme de ellas, pero, y sin embargo, salté sobre mi sillón cuando 20 años después de haberse formado, y salvando todas sus supuestas irreconciliables diferencias, amoríos, y adicciones, los miembros originales de cultureclub se juntaron para ofrecer su primera (y única) gira de re-encuentro. Algo dentro de mí quiso escapar (otra vez), esta vez a london, para verlos como en realidad me lo he merecido desde que empecé a escucharlos, pero esto, como siempre me sucede, nunca pasó.

Me remití a seguir de lejos todas las presentaciones de de estos tíos que le dieron un sonido diferente al pop, y me quedé con el triste consuelo de regalarme (yo mismo) el nuevo DVD que registra el primer show en directo (después de innumerables años de ausencia) de la banda. Si, el mismo al que no pude asistir.

Lo revise contento en la soledad de mi habitación, y lo guarde con sumo cuidado en el estuche de cartón, en donde reposan todas las canciones de la banda que me abrió el camino a un sin fin sonoridades en todos los sentidos. Un día me alejé de todos, y me escapé (como siempre quise) de este país, una y otra vez.

Me codeé con boygeorge y una trouppe de sus alegres amigos en un club nocturno en newyork. Mi compañera de turno, no podía creer que yo pueda sentir tanta empatía con un tipo de apariencia tan ambigua; yo, estaba totalmente en shock, y solo (y para mis adentros) reproducía algunas de las letras que se habían grabado en mi cabeza durante toda mi vida, mientras mi amiga, trataba de capturar mi atención, confesándome algunas de las cosas a las yo fingía (como siempre) in sinuosa curiosidad.

Me olvide del tema pasados algunos meses, me olvide de la banda pasados algunos años, me olvide de mis sueños cuando decidí quedarme en este país, y, cuando ya creía que nada en este mundo me devolvería esa vieja quimera de escuchar esos temas en vivo, una hermosa tarde de otoño me devuelve la ilusión de mis primeros años cuando se anunció (para mediados de septiembre del 2008) en lima, la visita de boygeorge, ofreciendo un concierto. Si, ahora, y cuando ya esta casi acabado (es verdad), para regalarle a ese público que lo ama, solo una mísera hora de su legado musical, solo algunos de los temas de la banda que lo convirtió en el hermoso chico delicado e inestable, adicto a los amores imposibles, a la heroína, y a extrañas sectas religiosas. Más nada, nada en este mundo nos desanimo a los pocos gatos que nos dimos cita en el viejo estadio nacional para encontrarnos con este man, para encontrarnos con ese eslabón que nos ha enseñado a través de su música a escuchar con el alma, con todos los sentidos.

ALTA FIDELIDAD: Muchas de las cosas que hay alrededor de la música no tienen nada que ver con ella, eso es verdad, pero aquí, y a pesar de que esta cantado el hecho de que su regreso fue por dinero, fueron (como siempre) los fanáticos, los que más disfrutamos con su efímero retorno. Aquí la banda celebrando su 20avo aniversario en el mitico royalalberthall en el 2002.


Me tildaran de cualquier cosa, pero jamás podrán decir que yo… no siento la música.

ARTE RETOQUE & DESEFOQUE: BABU